miércoles, 26 de octubre de 2016

Universitarios y cultura

Preguntas y respuestas a estudiantes universitarios del campus de Moncloa de la Universidad Complutense de Madrid sobre sus hábitos culturales.
Preferencias
Sin lugar a dudas, el producto cultural más consumido entre los jóvenes estudiantes consultados es la música. Esta opción se impone sobre todas las demás. Muchas de las respuestas que contenían al contenido musical como principal se acompañaban de una explicación. Es muy consumido porque la escucha de música se puede realizar casi en cualquier parte, incluyendo transporte público o la biblioteca por ejemplo.
Frecuencias
Las personas consultadas afirman consumir productos culturales todos los días. Si prevalecen la tarde y las horas de la noche como principales para consumir cultura. Este último periodo (el de la noche) es reservado mayoritariamente para la lectura o para acudir a las salas de cine.
Canales de información
Internet es la principal puerta de entrada que utilizan los jóvenes para enterarse de los último productos culturales que aparecen en el mercado. Más concretamente la red social Facebook, lidera como principal respuesta a esta pregunta. No lejos quedan otras opciones como la red de microblogging Twitter o páginas especializadas en determinadas opciones culturales.
Frenos al consumo cultural
Aunque la mayoría de los estudiantes consultados afirman estar satisfechos con la oferta cultural que tienen a sus alcance, si hay muchas respuestas que recriminan un alto precio de la cultura. Además dos personas consultadas expresaban una queja más concreta: la falta de libros asequibles en idiomas que no estén escritos en castellano.
Precio
De media entre las respuestas a la pregunta sobre el gasto en cultura mensual, los jóvenes se gastan alrededor de 20 euros al mes en productos culturales. Aún así muchas respuestas han sido claras, no gastan nada en cultura pues utilizan servicios gratuitos de streaming para escuchar música o hacen uso de páginas gratuitas para ver peliculas en internet.
Conclusiones
En definitiva, la muestra ofrece un panorama superficial a los hábitos culturales de una población muy concreta, los jóvenes estudiantes de Madrid. Cada uno con situaciones sociales y económicas diferentes pero ofreciendo unas respuestas bastante parecidas en su mayoría.

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